La panadería, el transmilenio, las flores de los vecinos y el espacio escultórico del MAC, entre otros espacios cotidianos del Barrio Minuto de Dios , territorio en el que está ubicado el museo, fueron el escenario de inspiración donde los artistas Klaus Fruchtnis y Raúl Marroquín interactuaron con los públicos que se inscribieron al “Taller creativo Playground”, que tuvo como objetivo realizar una obra colectiva entre los participantes y artistas a partir de la exploración del espacio urbano.
El taller se inició con un recorrido por la exposición, en el que los públicos tuvieron la oportunidad de conocer los cuestionamientos, anécdotas y reflexiones que conforman las obras, junto con las técnicas artísticas en las que se involucran la tecnología de usuario. Luego de la visita el grupo exploró el barrio apoyados por teléfonos celulares, tablets, drones y cámaras fotográficas, con los que consiguieron reproducir imágenes, interpretar e imaginar el espacio urbano del Minuto de Dios.
De regreso al museo se plasmaron sobre el papel los lugares, objetos, paisajes y personas que captaron la atención de los asistentes. Una vez hechos los dibujos con ayuda de una aplicación móvil que permite desarrollar realidades aumentadas, se experimentó con las cámaras de los celulares sobre las imágenes y se desarrollaron animaciones sencillas superpuestas a los dibujos.
En este encuentro la creatividad de los asistentes, y la disposición por parte de los artistas de transferir sus conocimientos, dieron como resultado, una obra colectiva que trascendió el territorio del museo y fue expuesta en la Galería Christopher Paschall S XXI, en el marco de la exposición colectiva “ Back/Play/Forward” de Raúl Marroquín y Klaus Fruchtnis.
Esa pasión por interactuar con los públicos, ha sido una determinante en el trabajo que desarrollan estos dos artistas, tanto así que el Programa Educativo de NC- arte , también tuvo la oportunidad de desarrollar un taller enmarcado en realizar un planteamiento crítico del barrio La Macarena.
La posibilidad de tener una obra con realidades mixtas en tiempo real, y aprender sobre el arte de interacción social fue el logro que se alcanzó con el taller. El museo y los asistentes quedaron motivados a seguir explorando este tipo de plataformas, ya que gracias al encuentro con los artistas se usaron nuevos medios de comunicación como elementos de trabajo y de inspiración, a la par que se descubrieron herramientas que cuestionan los procesos artísticos y que contribuyen a tomar conciencia sobre el espacio urbano.
Tatiana Quevedo
Coordinadora de Educación – MAC